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sábado, 24 de septiembre de 2011

~9~

Esta puerta... Es tan... Grandiosa... Y tan... Cálida... Y reconfortante... Tengo que... Que cruzarla... Tengo que ir con... Adelayla y Zoila... Pero hay tanta luz... No puedo mirar... Duele...

¿Qué? ¿Qué ha pasado? ¿Ya está? Que habitación más grande. Y qué vacía. Pero noto a alguien cerca. Bueenoo... Si me tumbo no pasará nada... Y si me hecho una cabezadita no creo que importe muchooo...

sábado, 3 de septiembre de 2011

LA PUERTA

- Bueno, ya hemos llegado.- Dice David parándose delante de una gran puerta.
- Pero... todavía tengo muchas dudas. Por ejemplo, ¿Pandora se enamoró de Alexandro? ¿Alexandro amaba a otra?
- Todas esas dudas las estudiarás en el internado.
- ¿¡Internado!?- Pandora y Alexander se miran y luego miran a David.
- Sí, donde os enseñarán a ser dioses, a manejar a los humanos, donde os contarán la historia de los antiguos dioses...
- Bueno, pues entonces no hay más opción.- Dice Alexander, rendido.
- Ah, y antes de nada... Pandora, tú te instalarás con las otras diosas completas. Sólo pregunta por Adelayla y por Zoila. Alexander, yo te llevaré hasta tu habitación. Espero volver a verte pronto Pandora... Antes de que se repita.- Y esa última frase la dice en susurros.
- ¿Qué?- Pregunta Pandora.
- No, nada nada. Hasta pronto...

jueves, 1 de septiembre de 2011

LA LEYENDA

Hace ya como una media hora que los chicos han salido de la casa. David es el único que parece saber a donde se dirigen. Pandora y Alexander no entienden qué hacen adentrándose tanto en el bosque. Las hojas secas de los árboles crujen bajo sus pies...

- Somos como dioses.- Dice de pronto David. No se vuelve para mirarlos ni se para, al contrario que ellos.
- ¿Cómo que dioses?- Dice Pandora
- Os contaré la leyenda... Ha vosotros os influye más directamente, porque sois descendientes directos.
- ¿Descendientes directos de quién?- Estaba vez lo ha preguntado Alexander.
- Escuchar la leyenda. Eso os aclarará muchas dudas...

Hace tiempo, nadie ha especificado cuándo exactamente, una jóven encontró en este bosque la Caja de Pandora, enviada por los antiguos dioses. La muchacha fue al pueblo cercano- tu pueblo, Alexander- para intentar devolver la caja al posible propietario. La muchacha era huérfana, y una familia la acogió. La familia tenía un sólo hijo. Algunos dicen que el joven se llamaba Alexandro, pero nadie lo sabe exactamente. La muchacha, a la que la familia llamó Pandora por la caja, se enamoró del joven. La familia convenció al joven para casarse con Pandora, pero él en realidad no la quería. Cuando, tras pasar el tiempo, las gentes del pueblo le dijeron a Pandora que la caja no era de ninguno de ellos, Alexandro la echó. Totalmente destrozada, Pandora huyó con la caja y, en el lugar donde la había encontrado, la abrió. Fue entonces cuando Pandora desató los tormentos para la humanidad, convertida en diosa. Pero, a su vez y debido al matrimonio, Alexandro también se convirtió en dios. De ellos descendieron una serie de semidioses, pero cada cierto tiempo nacen niños con genes completos de dioses, siendo familiares lejanos de Pandora y Alexandro.

- Vosotros dos sois esos descendientes y estais destinados a dirigir las emociones de la humanidad, junto al resto de los semidioses...

ÉL

David llama a la puerta varias veces hasta que Pandora por fin se despierta y abre.

- Buenos días, bella durmiente.- David la despeina con la mano y la sonríe.
- Buenos días David.- Coge una galleta de chocolate y le ofrece otra a David.- ¿Quieres?
- No, además, tenemos prisa.
- ¿Tenemos? ¿En plural?
- Sí. Él, el otro elegido también viene. ¿Ya te lo dije, no?
- Sí. Dile que pase mientras me visto.
- Alexander, entra.
- ¿¡Alexander!?- Pandora se queda con cara extraña. Sin embargo Alexander está de lo más tranquilo.
- Ah, hola. Al final cumplí mi promesa. Jajjajaja
- Bueno, luego, mientras llegamos a La Puerta, os explico cómo van las cosas.
- Sí, no estaría mal...- Dice Pandora mientras se dirige hacia el baño.

- Está en sock.- Dice Alexander mientras se ríe.
- Seguramente.- David también se ríe.- Pero ahora os explicaré las cosas y se irá relajando...
- O se asustará más.

Y ambos se ríen, como si fueran personas normales...